
Esta es mi orilla. Aquí es donde me paro y desde donde grito, declamo, insisto.
Aquí planto mi bandera blanca y negra, aquí me rasgo las ropas.
Se que estoy enfermo y que mi mal es incurable.
a los cuatro vientos me rio.
en tu cara me rio y me vomito.
Pasta base para todos, están muy sacados.
Hacen falta John Lennon, Bob Marley, Stanley Kubrick.
Hace falta una espada.
Esta es mi orilla. Aquí me quedo. Aquí confío en mi.
Y ustedes que pasean su soberbia y se contemplan en el reflejo,
ustedes que no tienen límites para la razón,
van a verme zambullirme, y no harán nada más que festejarme el chiste?
Shame of you! Shame of you motherfucker!.
La orilla está vacía. Estela sobre la superficie del río: sombra de un cuerpo que aún no toca el fondo. Ahora si.
Figuras de espanto que le vuelven al espalda al agua, y se olvidan facilmente, tan facilmente.
Y todo sigue, y nadie recuerda el día en que una luciérnaga voló hasta la luz de neon y se quemó.
Tan triste, tan triste.
Le habían vendido un calendario deshojado, una vida de televisión.
Y se borró para siempre de sus memorias.
2 comentarios:
y quizás la existencia no sea más que un grito que irrumpe, presuroso, y tras sus pasos vacilantes la libertad.
y si, hacen falta todxs ellxs y cabría agregar más. nunca nos cansaremos de decirlo.
que bueno volver a escuchar su voz, querido amigo.
salud y alegría!
si, estoy medio tartamudo por estos dias. es el trauma. de todas maneras agradezco su grata presencia, la de siempre. y espere una visita por el planeta devorado, alli estare pronto. adios.
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